Fuimos convocadas por las hermosas compañeras de LatFem a participar de un camping feminista ATP y ATR en momentos donde las metáforas son endebles así que huelga aclarar: no hubo ni carpas ni fuego con leña, pero sobró glitter, música, fulbito y aprendizajes.
La cosa es así: un lineup que reunía lo mejor que tienen para ofrecer los feminismos y las amistades feministas para rellenar todo lo que había en el medio, acuarteladxs en los bellos espacios del Konex. Empezamos con el taller de Glitter y pancarta, dado por la genial Fátima Pecci Carou, más de media docena de pibis acompañadas por sus mapadres y yo. No me sentí fuera de lugar en ningún momento, excepto por algo de envidia que me generaba un dibujo de una niña alada que era increíble. Manifesté que lo mío quizá iba por las letras y me acercaron una hoja con disparadores: ‘estoy en edad de merecer RESPETO’, ‘fanática de los boliches’, ‘puta feminista’, ‘yo elijo cómo me visto y con quién me desvisto’, ‘vamos las pibas’ y mi favorito personal, ‘no soy un perro, no me silbes’.
Anuka Fuks y un séquito de personas con habilidades deportivas abrieron El fulbito de las pibas, ¡que nunca cerró! Pelotas rebotando por doquier y puro disfrute futbolfeminista.
En el otro taller para niñxs, Cómo convertirme en brujx feminista, conjuramos protección y fuerza para nosotras con un Manual de hechizos hermoso para colorear que incluía unas definiciones prácticas de violencias machistas ATP (aclaraban que no son monstruos pero las podíamos alejar con brujería feminista) y un hechizo de humo bajo la luna.
A su vez, en el fogón (muy concurrido) de Astrología queer, Astromostra se ganó mi corazón hablando de las condiciones materiales de producción de los horóscopos y del cambio que implica esta apropiación de saberes por nosotras, las brujitas de a pie. Ni hablar del taller de twerk, dado por la genia de Meela (fundadora de Twerk Lesbiano), que nos puso a mover las cachas después de hablarnos de cómo esta baile de los márgenes de Nueva Orleans fue cooptado por estrellas de Disney. Movimos el suelo pélvico como pudimos, la verdad.
El sol se iba escondiendo entre los edificios del Abasto y llegó el plato más intergeneracional del camping: la entrevista pública de Thelma Fardín y Maite Lanata por María Florencia Alcaraz. Las dos actrices, aún con sus trayectorias muy distintas, representan este cruce hermoso entre activismo, aprendizaje y coraje que vienen destilando las nuevas generaciones en el feminismo. Creo que la idea no es desmerecer las anteriores generaciones, ni obnubilarse con su juventud y temple, pero la realidad es que somos las pibas que bancamos las jornadas históricas de la no-sanción de la ILE, las que salieron y salen a romper el silencio. ¿Ustedes se dan cuenta de lo hermoso que son los feminismos en la Argentina? ¿Aunque ni siquiera nos podamos poner de acuerdo en el lugar de la próxima asamblea para el paro internacional?
(El día anterior hubo la primera asamblea para organizar el paro del 8/9 de marzo, día internacional de la mujer trabajadora, como todos los años, y como viene sucediendo con más frecuencia, digamos que fue picante)
Cerró esa jornada hermosa de amigas, strass, cerveza por litro y selfies Amor Elefante, bajo la luna llena en Leo y lleno de brujitas. Gracias LatFem, gracias al Konex por avivar tantos fuegitos.
vaga fiebre 